¡Hola! Soy Zeus, un perrito muy cariñoso y sociable con otros amigos perrunos, al menos después de conocer a Mr. Hueso, ¡pero no siempre fue así! Os cuento mi historia…
Nací en un terreno de Pastriz (Zaragoza) en mayo de 2022, junto a muchos otros perros de diferentes razas y tamaños, con los que no llegué a congeniar muy bien.
Cuando tenía cuatro meses y medio, unas personas que pronto se convertirían en mi familia, llegaron a mi vida. Ese día en el que vinieron a buscarme, yo estaba un poquito asustado, porque uno de los perros con los que vivía en ese terreno me había mordido en mi hocico. Así, cuando les conocí, llegué con una herida sin curar y llenita de tierra, pero me dieron mucho amor para que me sintiese todo lo cómodo posible, dentro de ese monstruo metálico al que llaman coche.
La verdad es que era un poquito más grande de lo que le habían contado a mi nueva familia, pero me aceptaron y me quisieron igual.
Cuando bajé del coche, me encontré rodeado de muchos otros vehículos que hacían bastante ruido y me quedé paralizado, no quería moverme, no sabía dónde estaba y la correa que llevaba atada al cuello me hacía daño. Mi nueva familia entró a una tienda para comprar cualquier arnés para ayudarme a caminar y comencé a caminar hacia mi nuevo hogar. Cuando llegué vi un cuenco de comida, agua y una camita llena de juguetes, ¡sólo para mí! Hasta ese momento había tenido que compartirlo todo con los perros con los que convivía.
Mi familia pensaba que era un perro mudito, no ladraba con el timbre, ni con los coches, ni cuando llegaban a casa. Hasta que dimos el primer paseo, en el que lloré mucho al encontrarme con otros perritos, ya que no sabía si serían amigables o querían morderme. En los siguientes paseos pasé de llorar y esconderme a ponerme muy nervioso y empezar a ladrar sin parar. En ese momento, mi familia, que conocía a un tal Mr. Hueso, contactaron con él para que les ayudase a poder hacerme feliz y… ¡Así fue!
Raúl hizo un estudio muy exhaustivo sobre mi familia, mi nuevo hogar y sobre mí. El primer día que le conocí me calló muy bien, notaba que me entendía, como si hablase mi idioma, así que me quedé tumbado debajo de su silla mientras hablaba con mi familia.
A partir de entonces, con un material adecuado de paseo, consejos y normas consensuadas entre todos los miembros de mi familia y un peluche al que le cogí mucho cariño y aún conservo, las cosas empezaron a mejorar.
El segundo día que vi a Raúl vino con su amiga Peca, al principio no me cayó muy bien porque ¡se comió mi comida y se bebió mi agua! Luego bajamos a la calle, estuve ladrándole durante mucho rato, pero poco a poco me fui sintiendo más cómodo con ella, no entendía por qué se portaba tan bien conmigo. Y al final nos hicimos súper amigos, fue el primer paseo que disfruté en mi vida.
Desde entonces fui acercándome poco a poco a los perritos que iba encontrándome por la calle en los paseos y fui perdiendo mi miedo, fui aprendiendo a saludarles y a cómo acercarme para que no se enfadasen conmigo.
Conocí a mi prima Nala, que el primer día no me cayó muy bien porque se tumbó en mi cama. En realidad yo a ella tampoco, porque le ladraba para que me hiciese caso y ella se iba a otro lado. Hasta que poco a poco nos fuimos haciendo amigos, paseamos y jugamos juntos, incluso pasamos días enteros en la casita de Pastriz de mi familia.
Mi familia fue aprendiendo a cómo darme un buen paseo con un curso de Paseos Felices que les dio el señor Mr. Hueso, empecé a disfrutar cada uno de ellos y ahora me encanta saludar a todos los compis perrunos con los que me voy encontrando. Incluso, si se enfadan un poco, yo me quedo tranquilo para ayudarles, como antes me ayudaron a mí perras como Peca.
Todavía sigo trabajando en poder disfrutar del agua como muchos de mis amigos y amigas, pero, de momento, prefiero lamer los charcos en lugar de rebozarme. Eso sí, ¡descubrí que la nieve me encanta! Me lo paso súper bien con mi familia en ese tipo de paseos por la montaña, sobre todo cuando está teñida de blanco.
Este ha sido el primer año que he podido ir a Chaorna, un pueblo en el que disfruté muchísimo de la naturaleza, los paseos por la montaña, los riachuelos en los que metía mis patitas y de toda su gente, ya que me dieron muchísimo cariño, ¡como si me conociesen de toda la vida! Conocí a otros dos primos: Ares, un perrito muy pequeño y juguetón que estaba muy viejito; y Tuki, que tenía sólo tres meses pero ya era más grande que yo. Tuki fue un poco intensa la primera vez que nos vimos y no me gustó mucho. Pero la siguiente vez, como yo tenía muchas ganas de jugar y Ares no podía más, pude jugar con Tuki y me lo pasé genial.
Después de muchas perroaventuras y viajes con mi familia, he crecido y aprendido a disfrutar en cada lugar. Lo que tengo muy claro, es que me encanta restregar mi tripita en cada zona de césped que me encuentro por el camino, es algo que me apasiona y me emociono tanto, que a veces ladró y todo.
Ahora que ya tengo dos años y medio, he vuelto a reencontrarme con Mr. Hueso en uno de los paseos Felices y se alegró un montón de ver cómo había evolucionado. Pude lidiar en algún conflicto y defender a mi nueva amiga Cuca. Raúl me dijo que estaba muy orgulloso de mí porque había aprendido a gestionar mis emociones muy bien y porque sabía cómo disfrutar de los paseos y de la compañía de otros perros, algo que al inicio, era totalmente impensable.
A día de hoy, gracias a la ayuda de Raúl y al compromiso y amor de mi familia, puedo decir que soy un perrito muy feliz, con ganas de disfrutar de cada momento y seguir viviendo un montón de perroaventuras.
Como participamos en el «Concurso del año Mr. Hueso 2024» y mi foto fue seleccionada para salir en el Calendario Mr. Hueso 2025, soy la prota del mes de mayo, así que ese mes quien quiera conocerme que se apunte al Paseo Feliz de Zaragoza porque allí me tendréis disfrutando de ese gran premio para mi y mi familia.
Ese mes Mr. Hueso también viaja a mayo para uno de los dos paseos grupales en la provincia de Barcelona, porque en noviembre volverán allí, qué suerte tienen los perros de esa provincia, que no dejen de aprovecharlo!!
