Cada vez más personas y más familias decidimos compartir nuestra vida con uno o varios animales, una decisión que más allá de las emociones y esperanzas iniciales, debería estar repleta de recursos, conocimientos y tiempo para construir una adecuada convivencia que garantice el bienestar del animal y de las personas de la familia.
Aristóteles dijo «Algunos creen que para ser amigos basta con querer, como si para estar sano bastara con desear la salud»
¡Cuánta razón tiene esa frase!
Seguro que conoces a personas que no se saben querer y has tenido amigos/as que no saben ser amigos/as, y muy posiblemente las intenciones eran buenas, muy buenas, tenían muchas ganas de quererse y muchas ganas de compartir amistad, pero no sabían hacerlo y se hacían daño en el intento.
En Espacio Ítaca, nuestra división de atención psico-social humana, atendemos a muchas personas en esas situaciones, a las que ayudamos a saber querer, primero así mismos/as y después a sus familiares y amigos/as.
Porque no es fácil saber querer y mucho menos saberse querer, todos/as seríamos felices si supiéramos hacerlo siempre bien, tendríamos buena relación con nuestras familias, mantendríamos cientos de amigos/as durante toda la vida y en nuestro entorno laboral seríamos grupos de trabajo cohesionados y trabajaríamos ayudándonos unos/as a otros/as.
Pero no, esto no ocurre, no es fácil saber querer, no nacemos enseñados/as al respecto y cometemos muchos errores, en ocasiones sin ser conscientes de ello, y en otras de forma premeditada con acciones o palabras que sabemos que van a herir.
¿Y qué ocurre con las relaciones que mantenemos con los animales?
Ocurre lo mismo por desgracia, no sabemos querer y aunque tengamos las mejores intenciones cometemos cada día muchos errores con los animales.
Es injusto, muy injusto, porque en la mayoría de los casos esos animales nos perdonan una y otra vez nuestros errores y siguen a nuestro lado.
Pero no creas que lo hacen porque son nuestros mejores amigos como injustamente se ha repetido una y otra vez, lo hacen porque para algunos animales, como los perros, es mejor una mala vida acompañados que una vida solos.
Esto también le ocurre a muchas personas, toleran malas relaciones en su familia y sus amistades por no quedarse solos/as, pero ten por seguro que su vida no es feliz, no como podría y debería serlo.
Y los animales no dejan de comunicarnos su incomodidad por nuestros errores, a muchos de ellos les llamamos «problemas de comportamiento» de forma más injusta todavía.
Desde 2016 quisimos analizar esta cuestión y por eso paralelamente a nuestros ciclos formativos realizamos los estudios ¿Qué sabemos de perros?, donde personas de edades, profesiones, conocimientos, procedencias y circunstancias variadas responden a algunas preguntas sobre la relación entre las personas y los animales.
Entre los muchos datos recabados hemos elegido algunos para que compruebes que no eres la única persona que vive o siente que algo no va bien en su relación con los animales:
Datos del 1º Estudio ¿Qué sabemos de perros? 2016:
- El 100% declaran que no entienden la comunicación de los perros con los que se encuentran en los paseos y no saben si pueden o deben acercarse, o cómo hacerlo.
- El 75% adquirió, comprado, regalado o adoptado, a su animal a una edad inadecuada, separándolo antes de lo debido de su madre y hermanos/as.
- El 95% no sabe en qué etapa de desarrollo está su animal, y por lo tanto no puede saber cómo actuar para conseguir su desarrollo y educación adecuada.
- El 100% declaran que no tienen la relación con su animal tal y como la esperaban e imaginaban en los momentos de su elección.
- El 62% opinan que no saben cubrir las necesidades de su animal de forma adecuada.
Datos del 2º Estudio ¿Qué sabemos de perros? 2017:
- Su propia valoración de sus conocimientos sobre animales la puntúan en un 4.58, aspirando a mejorarla hasta llegar a un 9.16 sobre 10 para ser más felices y tener mejor convivencia.
- Si pudieran volver atrás a la elección del animal, la tercera parte cambiaría la especie y la genética elegida, la mitad optarían por animales de una edad diferente y el 100% intentarían elegir mejor en base al comportamiento del animal.
- Puntúan en un 4.23 sobre 10 la formación que tiene las personas que gestionan las protectoras de animales y las propias personas que en ellas colaboran puntúan en un 0.38 la formación de los/as nuevos/as voluntarios/as y en un 2 sobre 10 los conocimientos de las familias que acuden a adoptar.
- El 92% opinan que debería ser obligatoria una formación básica antes de convivir con animales.
Datos del 3º Estudio ¿Qué sabes de perros? 2018:
- Opinan que el bienestar de sus animales está en un 6 sobre 10, quedando muchísimo margen de mejora.
- Les preocupa las reacciones y comportamientos de reactividad y/o agresividad de sus perros en un 8.25 sobre 10, valorando que su animal tiene un grado de 4.5 sobre 10.
- Consultados por si disfrutan de los paseos compartidos con sus animales, los valoran en un 6 sobre 10, existiendo muchas circunstancias que no les permiten tener paseos satisfactorios y felices.
- Sobre la convivencia entre niños/as y animales la puntúan en un 5, opinando que pueden haber surgido más inconvenientes que ventajas tras su decisión de incorporar un animal a la familias con niños/as y haber existido situaciones de riesgo para los/as niños/as y/o para los animales.
- Reconocen que les es más complicado modificar un comportamiento aprendido por el animal que generar uno nuevo y se arrepienten de no haber sabido cómo enseñarles o actuar a su debido tiempo.
- El 29.29% siguen recurriendo a gritos y/o golpes en su relación con los animales por no saber cómo actuar de forma más adecuada en algunos casos.
- El 54.55% de las familias deben recurrir a un/a profesional para resolver problemas de comportamiento o de convivencia.
En estos datos pueden encontrarse miles de razones para los miles de animales que son abandonados cada año en nuestro país, relaciones que no funcionaron por no saberse querer, por errores en la mayoría de los casos de forma inconsciente y en unos pocos de forma consciente y premeditada.
Pero son muchos cientos de miles los animales que sin ser abandonados no están teniendo la vida que se merecen, igual que sus familias que podrían ser mucho más felices con la convivencia, sabiendo quererse, sabiendo entenderse y sabiendo convivir.
En Mr. Hueso atendemos a muchas familias con una variedad inmensa de pequeños errores que minan su relación, pero que apuestan por mejorarla y la mejor herramienta que les podemos ofrecer son los conocimientos.
Saber querer a nuestros animales es uno de los mejores regalos que nos podemos hacer a nosotros/as mismos/as y por supuesto a los animales, a los nuestros y a los de los demás.
«Cuanto más brillante eres, más tienes que aprender» Don Herold
Nunca lo sabrás todo, jamás, no cometas el error de pensar que no debes seguir aprendiendo porque estarás queriendo sin saber querer.
Nuestro mejor consejo, ya seas particular o mucho más si eres una persona dedicada de forma altruista o profesional a los animales, es que no pares de aprender y de mejorar en tu entendimiento, conocimientos y relación con los animales, cada día harás cambios a mejor y te darás cuenta de los pequeños o grandes errores que has ido cometiendo en el pasado.
Puedes formarte con Mr. Hueso o quien lo desees, pero no dejes de hacerlo nunca.
Nosotros/as cada año realizamos completos y variados ciclos formativos llamados ¿Qué sabes de perros?, no dejes de darle un vistazo a nuestra programación y agenda, encontrarás formaciones que te ayudarán a entender y relacionarte mejor con tus animales.
Estamos totalmente convencidos de que no hay otra forma de resolver la situación de falta de bienestar y de abandonos de animales en España, que no pase por la educación de la sociedad y de la formación adecuada de las personas que de forma altruista y/o profesional nos dedicamos al ámbito animal.
No solamente por nuestra convicción y apuesta por la educación, sino porque ha sido la solución real en muchos países.
Acabamos con una de las mejores citas de Mahatma Gandhi
«La diferencia entre lo que hacemos y lo que somos capaces de hacer bastaría para resolver la mayor parte de los problemas del mundo»
Y nuestra versión en relación a la convivencia entre personas y animales:
«La diferencia entre cómo nos relacionamos con los animales y cómo podríamos hacerlo si nos esforzáramos en entenderles mejor, bastaría para resolver la mayor parte de los problemas de convivencia y abandonos»
Haceros un regalo y disfrutad aprendiendo más sobre los animales con los que convivís.
Si quieres que te ayudemos a encontrar el animal más adecuado para tu familia estaremos encantados/as de ayudaros, viváis donde viváis no hay problema.
Y lo mismo si necesitáis ayuda en vuestra convivencia, en Mr. Hueso trabajaremos para mejorar vuestra relación.
Muy buen articulo y muy interesante estudio , el problema, entre otros , de las relaciones humano/perro es que nosotros lo que no sabemos es amar , porque querer es poseer , ejercer nuestra voluntad etc….pero amar es lo que hacen los perros .Amar es no poner barreras , no controlar , aceptar al individuo como es en su esencia , dejarle actuar con libertad , amarle sin querer cambiarle ……esa es la diferencia , que los perros nos aman y nosotros les queremos .Si quisieramos menos y amaramos mas , todos seriamos mas felices , el que ama y el que es amado .
Ya se lo decia el Principito a la rosa …..no te quiero , te amo ….si la hubiese querido la habria cortado para llevarsela , como la amaba , la rego, amar conlleva mas pensar en el otro que en ti mismo 😉
Compartimos contigo la diferencia entre querer y amar, pero si ya es difícil saber querer, mucho más lo es saber amar.
La capacidad de amar en un animal es relativamente fácil y habitual romperla, no es algo que siempre vaya a existir hagamos lo que hagamos a lo largo de su vida, por eso debemos conocerles mejor, para no deteriorar lo magníficos que pueden llegar a ser si les entendemos y queremos / amamos.
Muchas gracias por tu comentario.